
Golea 3-0 a Sudáfrica y se pone muy cerca de la clasificación a la siguiente ronda
Se trataba de castigar. De hacer trizas a un rival que pese a ser local no tiene potencia, poco juego individual y menos colectivo. Cero pegada. Vaya, nada de futbol.
De sacar la mayor diferencia de goles a favor que, seguramente al final de las sumas y restas, será vital.
Uruguay puso el abaco sobre la mesa e hizo su tarea, además, rompió un periodo sin ganar en un Mundial de 20 años, desde que derrotara a Corea del Sur en Italia 90.
Venció 3-0 a Sudáfrica y puso sus posibilidades de clasificar a la siguiente ronda en el tope de sus esperanzas y dejó las de los locales metidas en una caja fuerte sepultadas a dos kilómetros bajo tierra y sin pala.